martes, 22 de noviembre de 2011

LO ECHO DE MENOS.

Echo de menos correr un Ironman.

Hace ya más de dos años que no corro ninguno. Desde que cruce la línea de meta de Embrun 2009, no he vuelto a hacer ningún 3,8/180/42. Y lo echo de menos, la verdad.

Ahora que me planteo nuevamente correr uno, me gustaría volver a tener el objetivo que tenía cuando corrí el primero: acabar, cruzar la línea de meta, ser "finisher" nuevamente. Nada más. Y nada menos.

Soy veterano en esto del Ironman, más por años desde que debute en mi primer Ironman (1997), que por el número de veces que me he enfrentado a esta distancia (9). Pero a pesar de esta veteranía, pienso sinceramente que aun no he "aprendido" a correr esta prueba. En todos los Ironman que he corrido, ha habido un momento en que he perdido el control de la carrera y la carrera ha empezado a controlarme a mí, por decirlo de alguna manera. Y cuando el Ironman te domina, normalmente te hace pasar un mal rato. Un largo mal rato. A mí me ha dado duro unas cuantas veces...Sobre todo cuando lo he desafiado justito de entrenamiento.

Pero también en estas ocasiones es cuando más podemos aprender sobre esta carrera...

Pero me gustaría volver a hablar sobre objetivos.

Repito que mi objetivo en cada Ironman que he corrido ha sido, siempre, terminarlo. El entrenamiento (el físico, el mental, el "invisible"), nos pondrá a cada uno en nuestro sitio y nos otorgara un tiempo final más o menos rápido y una clasificación más o menos brillante. Pero, insisto, siempre (al menos en mi caso), el objetivo será cruzar la línea de meta.

Esto no es una falta de sana ambición. Soy tan competitivo como el que mas (el que diga que no lo es miente) y me gusta hacerlo lo mejor posible, pero una carrera como un Ironman me merece mucho respeto.

Sinceramente y sin ánimo de ofender a nadie, ni tampoco de dar consejos a nadie (Dios me libre de dar consejos...), no entiendo a muchos triatletas que se "acercan" al Ironman con esa falta de humildad que muchos demuestran hoy en día. Yo tarde siete años en sentirme preparado (física, mental, moral y técnicamente) para enfrentarme a uno. No estoy diciendo que haya que estar siete años haciendo triatlones antes de correr un Ironman; eran otros tiempos y fue mi camino, ni mejor ni peor que cualquier otro. Conozco muchos triatletas que han terminado un Ironman sin antes haber corrido ningún triatlón y lo han hecho con una madurez, preparación y rendimiento que ya quisiera para mí. Pero también conozco a muchos que, aun siendo finishers, están muy lejos de aquel triatleta completo, preparado en todos los sentidos, que siempre pensé que debería ser un atleta-ironman...Pero, como he dicho muchas veces, cada cual "enfoca" este deporte de una manera y cada una de ellas es tan válida y respetable como las demás. Otra cosa es lo que yo piense, o lo que me guste o no.

Por eso, ahora que vuelvo a tener ilusión por ser finisher, no quiero volver a caer en el error de mirar el crono, de hacer cálculos, de pensar en tiempos. Quiero acabar. Si he hecho las cosas bien, tendré mi recompensa. Si no he cumplido, Mr. ironman me lo hará pagar. No tengo ninguna duda.

Echo de menos la incertidumbre que se siente antes de empezar ¿Seré capaz de terminar? ¿Estaré suficientemente preparado? No quiero perder nunca esa sensación. Estoy esperando ese momento, en el kilometro 25 o 26 del maratón, en que empiezas a dudar, a creer que vas peor que nadie. Ese momento en que el dolor y la falta de energía te impide pensar con claridad, en que tu mente empieza a jugarte malas pasadas, en que oyes esa vocecilla diciéndote: "venga ya, tío, déjalo, que necesidad tienes de sufrir de esta manera, abandona...". Estoy esperando ese momento. Para mí, es el momento mágico del Ironman.

El desenlace de ese momento, de todo ese día, depende de ti. Depende de mí.

Espero seguir entrenando. Espero que la vida no me ponga ninguna zancadilla. Espero no ponérmela yo mismo. Espero estar en la línea de salida de algún Ironman (me gusta llamarlo así, aunque no sean "de marca"). Espero superar ese momento mágico al que me refería con la cabeza alta, sin aflojar el ritmo. Espero ser, nuevamente, Finisher.

6 comentarios:

davidiego dijo...

muy buena entrada, mis objetivos son acabar de un tirón, independientemente de la marca, aunque suele venir asociada, pienso como tú.

suerte y fuerza en tu próximo reto.

tonicendon dijo...

Pues vuelve a Embrum, yo también corrí allí en 2009 y lo hice sin reloj, yo no puedo ir mirando el crono, mejor voy sintiendo mi cuerpo, ese año a falta de 11 kilómetros para el final pregunté la hora por curiosidad y como me sentía bien acelere un poco, fue el único instante en que pensé en el crono.
Creo que en 2012 repito Embrum. Como dijo Esteban lo que se anhela es repetir momentos irrepetibles. Si te animas nos vemos allí.

JUANLU dijo...

He leido tus palabras y realmente halagan este deporte del TRIATLON. No dudes que volverás a cruzar esa linea de meta. No te conozco pero siendo leyendo tus lineas se que eres un verdadero hombre de hierro, uno de esos triatletas de antes, de los pioneros, de los que, en 1998 veiamos el finalizar un IRM una proeza inalcanzable y venerábamos y respetabamos a esos finihers. Yo he tardado 12 años (desde 1998) y 258 pruebas de triatlón y duatlón en sentirme preparado para el reto y este 2011 ha sido el 1º en Gales (y espero no el úñtimo) dando gracias en el sen-sei Cabeza que confio en mi desde el primer dia.
Estaré en Talavera, TRIATLETA, este fin de semana. No se si acudiras pero espero conocer algún día a un IRONMAN como tú.
Gracias por tus lineas.

Talin dijo...

Antonio, ni te doy consejo y mucho menos dicto una lección, ya que esto ya lo sabes, solo te lo recuerdo, para que lo mezcles con esas ganas de afrontar de nuevo La Distancia.

Sigo diciendo en que uno de los secretos está en saber improvisar; “cuando llega el momento en que se pierde el control de la carrera y la carrera empieza a controlar a uno” recuerda que “y si la tormenta no pasa, aprende a bailar en ella”.

Un IronAbrazo

antonio dieguez dijo...

davidiego: Gracias. Acabar de un tiron, sin caminar. Ese sera mi objetivo. Un abrazo.

toni: Aquel Embrun fue magico para mi (aunque sufri mucho...). Volvere a Embrun, no lo dudes. Espero coincidir contigo. Un abrazo.

Juanlu: No merezco tus palabras. Desde luego, estas en buenas manos con el maestro Cabeza. Dale un abrazo de mi parte. Espero conocerte algun dia. Un abrazo.

Talin: A ti te permito todos los consejos del mundo. Y este ultimo me lo grabo a fuego en la mente y el corazon. Gracias, Maestro. Un abrazo.

Pablo Cabeza dijo...

Para la liturgia, solo se está preparado después de un largo camino espiritual.

Un abrazo.