CON CORAZON Y POCO MAS

Bueno, faltan unos quince dias para el Ironcat y me asaltan mil dudas.

He tenido que estar practicamente sin entrenar (salvo alguna sesión de bici y alguna muy suave de natación) a consecuencia de la caída en bici, durante tres semanas, posiblemente tres de las semanas mas importantes de cara a la preparación de un Ironman. Ya soy capaz de correr 45´sin demasiado dolor, pero es una incógnita lo que pasara cuando lleve 2-3 horas de carrera...

Para colmo, me estoy resintiendo de una vieja tendinitis en el hombro.

Y en bici, he pasado de estar bastante bien, como hacia mucho tiempo que no estaba, a ir "justito" cuando paso de 4 hs de pedaleo...

Con este panorama me pregunto ¿debo ir a L´Ampolla? ¿Tiene sentido presentarse a correr un Ironman de este modo? ¿No es un suicidio (deportivo) intentarlo?

Si pienso un poco, la poca cordura que aun me queda me dice que me quede en mi casa, que ya habrá otras oportunidades. Es verdad, debería hacerle caso a mi cabeza...

Pero...

Mi corazón me dice que corra. No se muy bien porque. Pero voy a correr. Se que no es lo mas inteligente, lo mas prudente, lo mas correcto. Pero me he propuesto disfrutar de la vida que me queda por delante, y hacer este tipo de cosas me hacen sentir vivo como pocas.

Yo le he dado mucho al Ironman, al triatlon; le he ofrecido muchas horas de mi vida. Ha sido una de mis obsesiones desde hace mas de quince años, he apostado por el incluso profesionalmente. Por el he renunciado a muchas cosas; le he robado tiempo a mi familia, a mis amigos. A veces he pensado que si todo el tiempo que le he dedicado a este deporte lo hubiera "invertido" en otra cosa, quizas hubiera tenido una vida mas facil. Posiblemente sea asi, pero no hubiera tenido una vida tan llena, con momentos tan plenos, tan felices como los que me ha proporcionado este deporte.

¿Y porque este rollo pseudofilosofico-personal?

Porque le voy a pedir al Ironman que me excuse por esta ocasión y que me deje presentarme ante el de nuevo. Me presento con las manos casi vacías (entrenamiento), pero le voy a pedir que me deje estar allí. No le pido piedad, ni que me lo ponga facil. Tan solo que, aun juzgandome con la misma dureza que a los demás, no vea mi falta de preparación como una falta de respeto. Nada mas lejos de mi intención. Tengo la certeza de que, cuando el Ironman quiere, siempre es mas fuerte que nosotros. Tarde o temprano nos lo demuestra (como hizo conmigo hace dos años en el Ironcat...).

Le respeto profundamente.

Quizás respeto y corazón sean suficientes para ser, de nuevo, Finisher.

Lo dudo.

Ya os contare.